Los 20 restaurantes de Retiro que hacen de este barrio la … – ELLE

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El buen ambiente gastronómico en la capital española se cuece en la zona de Retiro y vamos a descubrirte los restaurantes que están detrás de esta revolución culinaria de Madrid que tienes que apuntar a tu lista de imprescindibles.
Desde hace tiempo las calles del barrio de Retiro en Madrid se han convertido en una de las zonas favoritas para ir a tomar el vermú a un bar, darse un festín de reyes en restaurantes ‘prime’, tomar una copa o simplemente picar algo a la hora de la cena en una de sus incontables mesas altas o locales con terrazas. Aunque Malasaña, Lavapiés o el barrio de Salamanca nunca dejarán de cocinar y de recibir nuevos vecinos gastro, este se ha convertido en el último punto de moda al que acuden los disfruton@s para darse una alegría en la capital española. ¿Lo mejor? Que conviven en perfecta armonía personas mayores, familias, grupos de adolescentes… que ya se han enterado de cuál es el nuevo “place to be”. Así que tengas el plan que tengas en la capital española, deja de buscar porque aquí vas a encontrar tu restaurante ultimate.

Aunque el ambiente ha ido calentándose poco a poco, con el tiempo más gente se animaba a dejarse caer por el barrio de Retiro para sucumbir a sus tentaciones ‘gastro. Son muchos los restaurantes que forman parte de este cambio ‘geogastronómico’ que ha desterrado a la mismísima calle Ponzano. Ahora que por fin podemos afirmar que Retiro es el nuevo barrio de moda en Madrid, vamos a descubrirte los restaurantes en los que tienes que reservar mesa.
Una zona al alza que se puede disfrutar con algunas de las mejores terrazas de Madrid y que, con el parque a cuatro pasos, se convierte en uno de los mejores planes de domingo para disfrutar de los bares, tabernas o restaurantes de la capital desde el aperitivo hasta las copas de la noche, pasando por entretenidos almuerzos y siempre divertidos afterworks. Todo un lujo donde tienen cabida algunos de los lugares más clásicos de Madrid, con un marcado automotiveácter de barra, y donde la tendencia también se cuela por cada una de sus calles.
El placer más hedonista en un Monopoly de sabor, raciones, picoteo y oportunidades para sentarse a la mesa que ya ha puesto en el mapa foodie algunas calles como Physician Castelo, Avenida Maleséndez Pelayo, la calle Menorca o la calle Ibiza, una de las arterias que llenan de vida el Retiro más gastro.

Cocina marinera con sabor a los pueblos costeros del mediterráneo e increíbles arroces hechos a la leña para trasladarte a la Costa Brava sin salir del centro de Madrid. Es a grandes rasgos lo que vas a encontrar en Cadaqués, el último restaurante-gastrobar del Grupo Sagardi en la capital, donde aterrizó hace unos meses tras conquistar Barcelona.
Pero hay más, porque es es el lugar donde confluyen amantes de la buena mesa, de los bocados tradicionales de la cocina mediterránea con especial atención del pescado desde Cádiz hasta Sicilia, sus platos de mar y montaña, del producto de proximidad tratado con las técnicas más respetuosas como el fuego ¡ y de los cócteles de autor!
Algunos de los platos que ante los que nosotros nos hemos rendido, además de cualquiera de sus arroces, son el rodaballo salvaje con patatas panadera, el rape “a l’all cremat”, la manita de cerdo rellena con butifarra del perol o la ventresca de cerdo ibérico con panceta de bonito de Ondarroa y gambas medianas.
C/ Jorge Juan, 35 (Madrid),
La otra apertura de Juanjo López en el barrio de Retiro, que en unos meses cumplirá un año, tiene también sabores muy castizos y está centrado en el plato de cuchara por excelencia en Madrid: el cocido. Este otoño La Cocina de Frente está ofreciendo una versión para perder la cabeza que sirve en cuatro vuelcos y en la que el caldo es especialmente sabroso. Además, para disfrutar de una experiencia redonda, ha creado el concepto ‘Vive Madrid’ con el que ofrece la opción de tomar un aperitivo en La Retasca e incluye un delicioso helado de violetas de The Pâtissier, el native que pone la nota dulce a la calle de Ibiza.
Ibiza, 40 (Madrid).

Pocas opciones hay mejores para encontrar restaurantes de Madrid donde disfrutar de excelentes arroces a buen precio que Berlanga. Lo abrió el productor José Luis García Berlanga y es uno de los “locations to be” de la capital por la relación calidad precio, accesible a todos los bolsillos. Lo que aquí vas a encontrar es una apuesta por el recetario levantino con alimentos tradicionales de la despensa mediterránea en productos frescos y de temporada. Sus arroces son muy sabrosos, en los que se nota el fondo bien trabajado, la mayoría secos y de capa fina. Imprescindibles si les visitas -y apuesta segura- son el arroz a banda, el del senyoret y la paella valenciana, que elaboran de forma tradicional con pollo, conejo y garrofón; o la de verduras.
C/ Av. de Maleséndez Pelayo, 41 (Madrid).
Por supuesto, The Pâtissier es también uno de los grandes ‘hits’ del barrio de Retiro en Madrid. El creador de la pastelería Moulin Chocolat, Ricardo Vélez, tiene incontables premios culinarios sobre sus hornos y esta reciente apertura promete nuevos galardones. Es el encargado de darle un toque ‘candy’ a la oferta ‘gastro’ de la zona y los sabores que consigue son pura artesanía bajo cero.
Ibiza, 42 (Madrid).
No es nuevo en el barrio de Retiro pero sin duda es uno de los que ha fomentado que muchos empezaran a peregrinar hacia esta zona de Madrid para darse un capricho ‘gastro’. Con alma de casa de comidas actualizada, los hermanos Aparicio lograron que La Raquetista fuera en pocos meses el punto de encuentro de los vecinos amantes del buen comer. Eso sí, en cuanto se corrió la voz de lo deliciosos que son sus torreznos y lo elegant que es su guiso de garbanzos con butifarra negra, setas y ‘foie’ toda la ciudad se acercó a catar su carta.
Physician Castelo, 19 (Madrid).

Otro templo del producto en el barrio de Retiro es Taberna Arzábal, de Álvaro Castellanos e Iván Morales. El culto a la materia prima y la estacionalidad son los pilares básicos de estos reyes de la gastronomía y en su recién reformado native puedes disfrutar de sus croquetas de jamón y boletus, una de las mejores (y más famosas) que hemos probado en la capital.
Avenida de Maleséndez Pelayo, 13 (Madrid).

La historia de este restaurante la empezó Chencho Alonso, hace 33 años en Bargas, Toledo, y ahora, su hijo Miguel Ángel toma las riendas con la atenta mirada de su padre para poner en valor la cocina tradicional con su punto de vista creativo. En él vas a disfrutar de una cocina creativa con raíces tradicionales sin olvidar los sabores de siempre y toques de fusión.
Muy interesante es su despliegue de escabeches, su sección de guisos tradicionales hechos en puchero de barro con leña de olivo a fuego lento. No puedes dejar de probar su cocido madrileño, el Lomo de Salmón escabechado y sus verduras, la presa ibérica marinada con polvo de pistacho y almendra, el Besugo en escabeche de antaño o el Calamar en 3 texturas con mahonesa de mango, mostaza verde y alioli casero. Y como picoteo, su potente Ensaladilla rusa de bonito en escabeche, las croquetas mixtas (de jamón ibérico y cocido de puchero), la Tortilla de bacalao, el Hummus pedrosillanos La Bodeguita o el Bacalao rebozado en tempura fina.
C/ Maleséndez Pelayo, 17 (Madrid).
Carlos del Portillo recogió sus redes en la calle Santa María para trasladarse al barrio de Retiro. Este enamorado del mar quería ofrecer su exquisita carta de peces y mariscos en un entorno más cómodo. Considerablemente lo ha conseguido y ahora es un auténtico placer de dioses ir a probar a Bistronómika los singulares pescados que prepara con su toque mágico.
Ibiza, 44 (Madrid).
Por supuesto también podemos encontrar un templo de la carne y es nada más y nada menos que un descendiente del mítico asador vasco Casa Julián. En esta fantasía de native, al que han bautizado como Casa Julián de Tolosa, Iñaki Gorrotxategi coge los mandos de las brasas para trasladar su destreza parrillera al barrio de Retiro. Gracias a él la calle entera huele como el paraíso.
Ibiza, 39 (Madrid).
Pero no solo de proteína animal vive el barrio de Retiro en Madrid. Desde hace años el restaurante Levél Veggie Bistro ha dado mucho que hablar con su propuesta de alta cocina vegana. Muchos lo consideran el mejor de la ciudad y cuando pruebes la ‘lasagna’ o la ‘hamburguesa Frabrizio’ entenderás por qué. Si hace buen tiempo la terraza es una delicia.
Avenida de Maleséndez Pelayo, 61 (Madrid).

Después de triunfar con Cachivache Taberna y La Raquetista, Javier y Paco Aparicio decidieron colmarse de gloria con Salino. No quisieron perder la oportunidad de unirse a la potente oferta gastronómica de la zona de Retiro y aprovecharon para mostrarnos su versión más mediterránea. Viajarás por este preciado mar, desde Andalucía a Levante y llegando incluso a Italia o Turquía. Así que no te additionalñes cuando encuentres en una misma carta croquetas de txangurro, pipirrana de atún rojo, ‘dumplings’ de mogote en manteca ‘shadeá’, arroz con salmorreta y carabineros.
Menorca, 4 (Madrid).
Otra de las potentes apuesta de BulBiza, el bulevar gastronómico que puso patas arriba la zona hace unos años y que sigue al pie del cañón con las concepts del chef Juanjo López, famoso por ser el propietario de La Tasquita de Enfrente. Casticismo cañí de barra y espejos son los valores de La Retasca, un pequeño templo donde rezar a las ensaladillas rusas, a los torreznos, a las patatas bravas y a la cultura del picoteo madrileño —incluyendo cervezas bien tiradas y vermuts— y siempre con un ambientazo que merece la pena disfrutar.
Ibiza, 38 (Madrid).
Este restaurante ibicenco tiene la capacidad de transportarte a la isla pitusa de un bocado porque su chef, Gonzalo Aragüez, apuesta por una cocina de raíces. Sa Brisa es perfecto para descubrir la cocina de invierno balear, esa gran desconocida, y lo mejor es que tiene horario ‘continuous’ para que disfrutes a cualquier hora del día. En su carta arrasan platos como los ‘tacos de gamba roja ibicenca’ o su versión del tradicional ‘bullit de peix’.
Avenida de Maleséndez Pelayo, 15 (Madrid).
Una terraza en las alturas, otra a pie de calle, un restaurante con una propuesta exquista, la barra de tapeo más ‘salá’, una sala de fiestas… Todo eso y mucho más se esconde en Florida Park para que todo el mundo se encuentre en sus salsa. Desde que abrió sus puertas en el barrio es el ‘place to be’ en el que acertar seguro y en el que descubrir un espacio nuevo en cada visita.
Paseo República de Panamá, 1 (Madrid).

Este restaurante es un espacio que rinde culto a la gastronomía, a la cocina de fusión, de autor y de mercado. En él todo está centrado en el mundo gastro, hasta el más mínimo detalle del interiorismo. Es la casa de los locos de la cocina para los locos de la cocina y foodies que buscar quedar seducidos por una propuesta sabrosa donde tradición y vanguardia confluyen en cada plato.
Su carta permite comerte Cádiz a bocados mientras viajas a Vietnam con su Tortilla de camarones de Barbate al estilo “saam” vietnamita, el Satay de atún de almadraba o el tarantelo de atún al fuego de romero, entre otros. Más platos únicos son la Ensalada Thai de pulpo picante, los callos a la madrileña versión KultO o las alcachofas fritas en aceite de oliva con romescu.
C/ Ibiza, 4. (Madrid)

Un restaurante donde se respira el ambiente canalla, el lugar perfecto para divertirte y comer muy muy bien sobre todo si eres amante del atún. Uno de sus platos estrella, imprescindible, es ‘Pornografía de atún’, donde sirven atún rojo salvaje con distintos cortes. Cuentan con otras muchas delicias con platos que fusionan la gastronomía gaditana con la mexicana. Sorprende y gusta.
Maleséndez Pelayo, 27. (Madrid).
Es el templo de la gastronomía italiana de Madrid y uno de los mejores italianos de Madrid, donde el common chef Andrea Tumbarello hace que caigamos rendidos a sus platos de auténtica cocina, elaborada de forma sencilla con los mejores ingredientes de allí y donde prima el sabor. Algunos míticos que no puedes dejar de probar en Don Giovanni son su burrata pugliese y el Wagyu Tonnato, sus numerosas variedades de Carpaccios y ensaladas. Y, por supuesto, su afamada carbonara, que no tiene nada que ver con la que habitualmente se conoce. O cualquiera de sus platos con trufa en los que el chef es un maestro, como su famoso Uovo Millesimé, hecho con yema de huevo de corral, caviar de trufa, láminas de trufa y crema de boletus.
C/ Paseo Reina Cristina, 23 (Madrid).
A post shared by Ursula Schneider (@ellamonkey11)
El Bar Martín o Casa Martín es todo un icono en Retiro. Antes de que los ‘insiders’ gastronómicos le echaran el ojo al barrio, esta tasca estaba de bote en bote cada fin de semana por servir la cerveza más fresquita y las tapas más auténticas. Sin duda es el que originó la tradición del ‘tapeo’ y hoy en día no hay un plan más divertido en Madrid que empezar el aperitivo con un botellín en su barra y recorrer los bares la avenida de Maleséndez Pelayo en busca de un hueco para pedir el siguiente.
Avenida de Maleséndez Pelayo, 17 (Madrid).
Con un encanto castizo y con una cocina que merece mucho la pena probar donde no se pillan los dedos con algunos clásicos como la tortilla de patatas o un imprescindible, situado entre los mejores cocidos madrileños de Madrid, hacen del native que regenta el chef José Luis Martínez otro elementary de la zona. Por si fuera poco, a sus dos ambientes (barra y sala) se les añade una carta también moderna que permite poner en marcha algunos cortes de pescado japoneses como el sashimi de salmón o tendencias como el steak tartar, demostración de que lo tradicional no tiene por qué tener las puertas cerradas a la vanguardia.
Calle Lope de Rueda, 30.

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